El Museo de Cáceres acoge una ponencia sobre el yacimiento de Huerta de Otero dentro de su ciclo de conferencias 'Arqueoforum'

El Museo de Cáceres, en colaboración con la Asociación 'Adaegina', celebra el próximo miércoles 19 de junio, a las 20:30 horas, en su salón de actos, la quinta sesión del I Ciclo de Conferencias 'Arqueoforum', un espacio de divulgación científica y cultural sobre el rico patrimonio extremeño. En esta ocasión, el arqueólogo José Vargas Calderón impartirá la conferencia titulada 'Huerta de Otero: un ejemplo de arqueología sostenible', en la que dará a conocer los últimos hallazgos y avances en este yacimiento arqueológico ubicado en Mérida. Vargas Calderón, licenciado en Geografía e Historia por la Universidad de Extremadura, ha participado en intervenciones como las de la Alcazaba de Olivenza, Cáparra, Zafra o el Castillo de Medellín. Desde hace cuatro años dirige la intervención arqueológica en el solar de la Huerta de Otero, dentro del programa Escuela de Aprendizaje Laboral 'Barraeca IV' del Ayuntamiento de Mérida, en colaboración con el Instituto de Arqueología y el Consorcio de la Ciudad Monumental de Mérida. DESCUBRIMIENTOS RELEVANTES Entre los descubrimientos más relevantes que presentará en su ponencia, destaca el mosaico romano de la Medusa, excavado por el alumnado de la Escuela Profesional Barraeca II. Este mosaico policromado de unos 30 metros cuadrados, perteneciente al pavimento de una estancia principal de una domus romana, representa una Medusa enmarcada en un medallón octogonal, acompañada de cuatro pavos reales que simbolizan las estaciones del año, así como aves, peces y máscaras ornamentales. Un hallazgo que se enmarca dentro de un proyecto integral iniciado en 2019 para la recuperación y puesta en valor de la Huerta de Otero, una zona arqueológica situada en el lado occidental de Mérida. Además del mosaico, las excavaciones han sacado a la luz un tramo de la muralla fundacional romana de más de 40 metros de longitud y cinco metros de altura, una calzada interior y unas termas privadas del siglo IV d.C., lo que convierte este enclave en una referencia esencial para comprender la evolución urbana de la ciudad emeritense.